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viernes, 18 de enero de 2019

LA GÉNESIS DE… EL PUEBLO DE LAS NUBES


LA GÉNESIS DE… EL PUEBLO DE LAS NUBES



            En esta nueva entrada dedicada a responder a la pregunta de por qué me dio por escribir tal libro, vamos a hablar de mi novela histórica EL PUEBLO DE LAS NUBES. Dicha obra está ambientada a finales del siglo XVI y principios del XVII en tierras de Nueva España y Nueva México, en la expedición del llamado “último de los conquistadores”: Juan de Oñate y Salazar.

Un poquito de contexto histórico

            Juan de Oñate protagonizó una expedición por lo que es hoy el suroeste de los Estados Unidos en 1598 reinando ya en España Felipe II. Alejada de las grandes conquistas que supusieron los imperios inca y mexica (azteca), la expedición de Oñate poseía otros objetivos muy distintos, tales como la búsqueda de tierras fértiles para la agricultura y la ganadería, el hallazgo de minas de oro y plata (las encontradas en Zacatecas, de plata, despertó la creencia entre los españoles que más al norte de Nueva México era posible encontrar nuevas minas), el contacto con tribus indias y establecer pactos de alianza y comercio y, sobre todo, encontrar el muy importante paso al mar del sur que se creía no podía estar muy lejos. Hay que recordar que por entonces no se pensaba que la parte de Norteamérica fuera tan grande y se pensaba que el mar del sur no podía hallarse muy lejos. De encontrar dicho paso, las posibilidades para el comercio eran ilimitadas.
            Lo que no podía imaginar Oñate, ni los miembros de la expedición, es que lo que iban a encontrar serían tierras desérticas o de pocos pastos, calores ardientes, fríos glaciales, tribus indias muy pobres y ríos anchos y problemáticos. Y por si fuera poco todo esto, también se las verían con indios muy hostiles de nombres tan míticos como los apaches o los comanches, pero sobre todo con los indios más valientes y fuertes de todo aquel extenso y desconocido territorio: los indios de Acoma, el pueblo de las nubes.
            Aunque en un principio las relaciones entre los españoles y los indios fueron buenas, pronto los de Acoma comprendieron que si se dejaba hacer a los recién llegados sus políticas de alianzas y comercio, la ciudad de Acoma, enclavada en lo alto de una escarpada y alta montaña de pico plano, perdería su puesto de primacía entre las demás tribus y quedarían relegados a un segundo plano. Decidieron entonces los de Acoma atacar primero y a traición a los españoles confiando que las demás tribus se les unirían. Se iniciaría así lo que la Historia ha dado a conocer como “la guerra de la Roca”.

La novela EL PUEBLO DE LAS NUBES

            Dentro de ese hecho histórico que es la expedición de Juan de Oñate y “la guerra de la Roca”, se encuentra otra historia que es ficción, pero que entrelaza muy bien con los acontecimientos y personajes históricos. Uno de los principales protagonistas de la novela es Juan de Maqueda, el líder indiscutible de su clan, los Maqueda. Toda la familia Maqueda está gravemente enemistada con otra familia, los Carmona, cuyo líder es Carlos de Carmona. Ambos clanes se ven enfrentados por sucesos sangrientos del pasado y desean buscar venganza. No obstante, los Maqueda y los Carmona son obligados por Juan de Oñate a iniciar una tregua ya que ambas familias participan en la expedición.
            Puesto que terminar con éxito la expedición es muy importante para los dos clanes, todos los miembros de los mismos respetan la tregua; al menos mientras dure la expedición. Durante el trayecto por cientos de kilómetros de tierra hostil, dura y seca, no parece haber problema entre los Maqueda y los Carmona, pero los acontecimientos se disparan a raíz del encuentro y relación entre Bartolomé de Maqueda, el hermano pequeño, y la también hermana pequeña de los Carmona, Isabel.
            El desencadenante de la guerra contra los indios de Acoma y la amenaza del levantamiento de algunas tribus indias supuestamente aliadas de los españoles también agravan el conflicto entre los Carmona y los Maqueda. Graves y sangrientos pecados del pasado saldrán a relucir y el honor, el sacrificio y la muerte se verán enfrentados en una feroz vorágine.

¿De dónde vino la idea de escribir esta novela?

            En 2009 salió a la venta un libro de divulgación histórica titulado “Banderas lejanas” escrito por Fernando Martínez Laínez y Carlos Canales. El resumen del libro enseguida me atrajo la atención. Dice así:
“En gran parte desconocida por los propios españoles, la gesta de la exploración, conquista y defensa que llevó a cabo España en lo que hoy son los Estados Unidos de América supone un acontecimiento histórico capital. Durante trescientos años, soldados, navegantes, misioneros, colonos y descubridores al servicio de España plantaron sus banderas en fuertes, poblados, misiones y ciudades repartidos por toda América del Norte, desde los límites de México hasta la frontera canadiense y Alaska. Españoles fueron los primeros europeos que avistaron el Cañón del Colorado, cruzaron el río Misisipi, atravesaron las llanuras de Kansas, se internaron en los desiertos de Nevada o fundaron ciudades como Los Ángeles, Santa Fe o San Francisco. Mucho antes de que Estados Unidos existiera como nación, España había conquistado ya el Far West y combatido o pactado con las principales tribus indias que luego el cine de Hollywood haría famosas. Desde Florida a California las enseñas hispanas ondearon sobre un enorme territorio que tuvo que ser defendido con escasísimos recursos. Este libro incluye por primera vez la lista de todos los fuertes, puestos fortificados, misiones y presidios españoles en Estados Unidos y Canadá. Con amenidad y rigor documental, presenta también una panorámica completa de los esfuerzos políticos y militares, y de los personajes que contribuyeron a fijar la historia apasionante, violenta en ocasiones y casi siempre heroica, de unos hechos que merecen ser rescatados del olvido y formar parte de la memoria colectiva hispanoamericana.”
Es un libro apasionante cargado de momentos históricos totalmente épicos y repleto de aventura, heroísmo y sacrificio. Si todas estas gestas e historias hubieran sido protagonizadas por ingleses o norteamericanos, no quedaría ninguna duda de que se hubieran hecho multitud de películas, series de televisión y se habrían escrito cientos de libros sobre todos y cada uno de los temas mencionados en el libro “Banderas lejanas”.
            Me sorprendió que en España no solamente no se conociera apenas nada de esto, sino que tampoco hubiera muchos libros, o novelas, al respecto. Bueno, ya sabemos que en España la ignorancia de su Historia es un hecho por desgracia constatado, así que no insistiré mucho en tal cuestión porque esta no es la entrada adecuada para ello, pero me propuse, a través de mi novela, aportar un granito de arena a la ingente tarea de intentar acercar estos hechos al gran público, tanto de dentro como de fuera de España.
            Del libro “Banderas lejanas” se pueden sacar múltiples historias. De hecho, mi idea es escribir un par de libros de los Dragones de Cuera, aunque eso queda para más adelante.
            Otra de las intenciones de “El pueblo de las nubes” es seguir atacando a la Leyenda Negra y a todos los prejuicios y mentiras que pululan alrededor de la Conquista. No se trata de enjuagar los hechos ocurridos, ni los errores, pero desde luego, no se puede permitir la constante difamación y manipulación a la que es sometida constantemente la Historia de España. También quiero, con mi novela, hacer un homenaje a la gesta de unos hombres y mujeres que abrieron nuevas rutas y establecieron contactos con otras culturas. Es inaudito que estos hechos se conozcan, se estudien en las escuelas de Estados Unidos y hasta se celebren sus efemérides y, en cambio, en España no solamente no se conozcan sino que no se haga nada por conocerlo.

Documentación y trabajo previo

            Cuando se quiere escribir novela histórica, al menos si deseas ser un mínimo fiel a la Historia (porque existe mucha novela que se considera histórica, pero no lo es) lo primero que hay que hacer siempre es documentarse y estudiar mucho la época histórica sobre la que deseas escribir. Pero la tarea no era tan fácil como parecía, porque como ya he explicado, no hay mucho material en español acerca de la expedición de Juan de Oñate. En la actualidad prácticamente apenas hay nada acerca del tema y tuve que ir a librerías de antiguo y segunda mano a rebuscar entre las estanterías. Tuve suerte y encontré unos pocos libros sobre el tema, en concreto una pequeña joya de los años setenta que trataba exclusivamente de la expedición de Juan de Oñate. Con información en páginas Web en inglés pude también ir rellenando huecos y documentarme mejor.
            Pero sobre todo me fue de gran utilidad y donde más me apoye la obra de Gaspar Pérez de Villagrá, militar y poeta que fue capitán en la expedición de Juan de Oñate. A raíz de los sucesos que le tocó vivir, Villagrá compuso su obra “Historia de la Nueva México”, que si bien está escrita en verso y se compone de ciertos elementos floridos, con el tiempo se ha demostrado que todo lo escrito en ella es rigurosamente cierto.

            Para conocer mejor a los indios y las duras condiciones en las que vivían, tiré también de otros autores clásicos y más crónicas de la época, teniendo finalmente una gran documentación que me permitió poder afrontar el trabajo de escribir la novela con ciertas garantías.

Escribiendo la novela

            Con todo, no fue tarea fácil escribir la obra, porque constantemente debía parar para seguir estudiando y corrigiendo errores históricos. Aunque la trama de ficción ya la tenía completamente pensada, tener que cuadrar esos hechos con los históricos me supuso un enorme trabajo.
            Como me suele ocurrir cuando escribo, al principio me entró el pánico al creer que no sería capaz de llevar a buen término la novela. A pesar de tener ya más de quince años de experiencia escribiendo, ese miedo es eterno. Luego, a medida que voy escribiendo y las páginas se van sucediendo una tras otra el miedo se convierte en determinación y en ganas de seguir para terminar cuanto antes y poder disfrutar de la historia terminada. Y también, como es habitual, los personajes tomaron “vida propia” y me impusieron sus personalidades y carácter. Ellos me ayudaron a que todo encajara.
            Me llevó algo más de un año escribir la novela. Tuve que parar en múltiples ocasiones para corregir o reescribir ciertas partes, y de igual forma me vi obligado a cambiar pequeños detalles históricos para que las historias de los personajes de ficción encajaran con facilidad en las tramas históricas; nada que cambiara el desarrollo histórico en general, pero es conveniente avisarlo.
            Una vez terminada la obra, y tras registrarla previamente en el Registro de Propiedad Intelectual, me dediqué a enviarla a diferentes editoriales con la intención de que la publiquen. Hasta el momento no he tenido suerte. He recibo varias ofertas de países latinoamericanos, pero sus condiciones no me convencieron y las rechacé. En España me he topado con la indiferencia por un lado, y por el otro con lo políticamente correcto que impregna en la actualidad nuestra sociedad. O dicho con otras palabras: me topé con la CENSURA.
            Sí, la censura. Aunque muchos sigáis teniendo una venda en los ojos que os impide ver la realidad, lo cierto es que en estos tiempos hay más censura en la literatura que en los tiempos del tío Paco. Es lamentable, pero es así. Recibí dos ofertas de unas editoriales para la publicación de “El pueblo de las nubes”, pero entre las condiciones para publicarla se encontraba el realizar cambios drásticos en el argumento y en eliminar ciertos pasajes. En concreto, se me pedía que eliminara lo que para estos nuevos censores y entes totalitarios de mentes cerradas se consideraba una “visión negativa” de los indígenas. Es decir, los indios nunca pudieron cometer traiciones, ni asesinatos, ni ser los primeros en atacar a los hombres blancos. En todo caso, los indios se limitaban a ser víctimas y a defenderse de los ataques de los malvados (y racistas) hombres blancos. Por lo mismo, los españoles no podían ser hombres (o mujeres) de probado valor, honor y compromiso moral tanto con los suyos como para con los indios. Me pedían que la visión que debía dar de los conquistadores siempre tuviera que ser bajo el prisma de que eran “malos”, “fanáticos” y “asesinos”.

            Por supuesto, a estas editoriales, educada, pero firmemente, las mandé a freír espárragos. Yo no escribo para estos tiempos, ni para ideologías. No sirvo más que a los lectores y a la Literatura. No soy un maestro, ni un inmortal de las letras, pero desde luego no voy a consentir que mis obras se vean convertidas en pastiches ideológicos según los tiempos que sean. Antes quemo todos mis libros y me muero de hambre.
            No voy a expandirme más en este tema. Tengo pensado más adelante escribir una entrada en el blog dedicada al asunto de la censura en la literatura española y como ciertos autores de renombre, a pesar de sus gritos de indignación y rasgar de vestiduras, se han rendido a ella. Así pues, terminemos con esta entrada diciendo que estoy muy orgulloso de “El pueblo de las nubes”. La considero una obra muy completa, que me costó trabajar terminar, pero una gran satisfacción cuando lo hice. Un proyecto personal que se puede conseguir bien en formato libro electrónico o formato libro en papel a través de Amazon. Ya son muchos los lectores que han disfrutado de la trama y de los personajes y me han escrito para comentarme sus partes preferidas o simplemente para dejar sus opiniones.
            A todos gracias por leer mis libros. Qué sería un autor sin sus lectores. Nada. Pero que sería un autor sin honor, ni valor, ni convicción en las ideas que cree. Un esclavo, eso sería.
            Así pues, amable, lector, toma tu mochila, la espada, el bastón de caminar y adéntrate en un territorio tan hostil como hermoso. Si te das prisa, todavía podrás ver la nube de humo que levantan las carretas y los animales de la expedición de Juan de Oñate. Ellos fueron los primeros pioneros y sus aventuras hacen palidecer a todas las historias del Far West norteamericano. Sumérgete en la Historia.